Lo que somos hoy, surge de todo lo que hemos sido.
Nuestra historia se remonta a finales de los años 40, cuando D. Pedro Hernández Lajara crea en Elda una pequeña empresa de pieles curtidas y acabadas. Un negocio que, con esfuerzo y de la mano de sus hijos D. Francisco Hernández y D. Juan Hernández , fue tomando forma y creciendo en reconocimientos.
En 1991 D. Francisco Hernández funda Curtidos Lajara, desde entonces se ha ido adaptando al sector y a las necesidades concretas de cada etapa, siendo dirigida de forma familiar hasta hoy, momento en el que los nietos del fundador coordinan la actividad.